Con la llegada del verano, los golpes de calor se convierten un uno de los principales problemas a los que se pueden ver sometidas nuestras mascotas. Su mayor sensibilidad al calor, hace que les afecte más que a los humanos, ya que su sistema no regula la temperatura corporal del mismo modo que en las personas. Es habitual ver a los perros jadeando en verano, y es que es así una de las formas que tienen para eliminar el sudor. En cambio, los gatos intentan mantener una temperatura estable lamiendo su pelo. Un golpe de calor en nuestra mascota puede provocar un colapso interno que acabe con ella en menos de 15 minutos.
¿Cómo evitarlo?
Hay espacios más propicios al golpe de calor, como los muy reducidos o mal ventilados, como una pequeña habitación, un coche, el transportín, etc. En verano, hay que mantener a nuestras mascotas en espacios bien ventilados y amplios, con sombra y con agua para beber las 24 horas. Es indispensable no dejar a nuestras mascotas al sol, sin un espacio dónde refugiarse de su calor, y no dejarlos bajo ningún concepto encerrados en el coche, aunque se dejen las ventanas abiertas.
Aquí os dejamos algunos consejos para que tengáis en cuenta para evitar el golpe de calor en mascotas este verano:
- Dar de beber al animal regularmente para evitar la deshidratación. El agua se debe renovar a menudo y se debe administrar en pocas cantidades.
- No dejar al perro o gato encerrado dentro del coche bajo ningún concepto.
- Sacar a pasear al perro en los momentos de menos calor y evitar que haga mucho ejercicio.
- No encerrar al perro o al gato en una habitación pequeña sin ventilación.
- Si el perro vive en el jardín, debería tener una sombra en la que cobijarse.
- En verano, es mejor darle la comida al perro por la noche porqué después de comer, los perros, son más propensos a sufrir colapsos.
- En caso de salir de viaje, es aconsejable llevar abundante agua y hielo. Si vemos que el animal se estresa, podemos colocar en el suelo del trasportín, toallas húmedas.
(Fuente: mundoanimalia.com)